





El tabaco es nocivo para la salud, generalmente se le asocia con el riesgo de padecer cáncer y pasamos por alto sus efectos sobre la piel. Aunque no solo afecta la piel sino muchísimo más: infartos, enfisema, bronquitis crónica, ulcera, gástrica, impotencia sexual, parto prematuro, daña tu boca, tus dientes y en general todo tu organismo.
¿Cómo afecta el tabaco a la piel? Fumar perjudica la piel
- La nicotina destruye gran cantidad de estrógenos y la epidermis se resiente, pues esta hormona femenina es responsable de suministrar la grasa que necesita la piel para mantenerse joven. La piel se verá seca.
- El cigarro afecta el riego sanguíneo de la piel (la sangre lleva oxígeno y nutrientes) por lo que la piel se verá deshidratada y sufrirá de elasticidad.
- Los radicales libres del cigarro causan envejecimiento prematuro y arrugas.
- Los componentes del cigarro causan manchas amarillas, en especial en los dedos y la mano (que es la zona donde más tiempo permanece el cigarro).
- Destruye la vitamina C que entre otras funciones estimula la producción de colágeno y ayuda a que las heridas cicatricen más rápido.
Claro que esto va a depender de que tanto fume y de otros factores como su dieta.
¿Qué hacer? Para contrarrestar los efectos del tabaco:
- Debe llevar a cabo una alimentación saludable rica en frutas y verduras; incluya todos los alimentos del plato del bien comer.
- Tome agua suficiente para mantener hidratado su cutis.
- Haga ejercicio.
- Tome frecuentemente vitamina C, que ayuda a sintetizar la vitamina A, responsable de la hidratación cutánea.
Pero sobre todo el mejor remedio es la prevención, por lo que invitamos a prescindir de este hábito nocivo para la salud. En especial las mujeres, pues su piel es más delicada que la de los hombres.