Tomar refresco en lugar de agua no constituye un hábito saludable, de hecho, resulta algo perjudicial, por lo que, no debe existir ningún motivo para sustituir la ingesta de agua por el refresco. Como antojo o como golosina, está bien un refresco, pero como bebida principal durante el día, a la larga perjudica la salud.
El refresco:
- No contiene ningún nutriente, pero si una elevada cantidad de azúcar, colorantes, carbonato, y muchas sustancias que tarde que temprano resultan tóxicas para nuestro cuerpo.
- Constituye un factor de riesgo para la formación de caries.
- El refresco engorda por la gran cantidad de azúcar que contiene.
- No quita la sed, por el contrario genera más, por lo que es necesario tomar otro refresco.
- El refresco, en especial los de cola, ayudan a descalcificar los huesos, haciéndonos propensos a padecer osteoporosis.
- Ayuda a que padezcamos hipertensión.
- No favorece la buena digestión.
- Afecta nuestra economía.
Beneficios de tomar agua en lugar de refresco:
- Facilita el transporte de nutrientes en el cuerpo.
- Hidrata el organismo.
- Mejora la digestión
- Ayuda a regular la temperatura del cuerpo.
- Ayuda a bajar de peso
- Mantiene la buena salud de los riñones.
- Previene riesgos de cálculos renales.
- Quita el mal aliento.
- Evita el estreñimiento.
- Mejora la calidad de vida.
Así que, lo mejor es el agua. Recuerde que debe tomar de 1.5 a 2 litros de agua simple al día. También se puede usar como referencia el tomar 1 ml de agua por cada caloría que se ingiera.
Tenga presente que la sed es una señal de deshidratación que nuestro cuerpo nos manda, tome agua con frecuencia durante el día, aunque no sienta sed. El refresco, déjelo para “ciertas” ocasiones, pero más véalo como una golosina.