





La vitamina A es llamada del crecimiento, es anti-infecciosa, ayuda a prevenir enfermedades gastrointestinales y respiratorias, además de que preserva la salud de la vista y evita la ceguera. Su carencia es más común en niños que en adultos.
La falta o la deficiencia de vitamina A en el organismo puede causar:
- Enfermedades de los ojos.
- Inflamación de las amígdalas.
- Trastornos en las vías respiratorias.
- Falta de apetito.
- Diarreas.
- Falta de vitalidad.
- Gripa.
- Catarros.
- Raquitismo.
- Caries.
- Piel seca.
- Mal proceso digestivo.
La vitamina A la encontramos en alimentos como:
- Yema de huevo.
- Naranja.
- Moras.
- Mango.
- Espinacas.
- Acelga.
- Grosellas blancas.
- Melones.
- Zanahoria.
- Granada roja.
- Trigo.
- Leche.
- Queso.
- Chicharos.
- Hígado.
- Brócoli.
- Chabacano.
- Mamey.
- Tejocote.
- Y prácticamente todos los cítricos.