Más del 10% de los embarazos acaban en un aborto espontaneo, casi todos ellos por existencia de una anomalía del producto de la concepción o del ambiente materno.
Algunas de las posibles causas que pueden ocasionar un aborto espontaneo:
- Anomalías del útero.
- Problemas de menstruación.
- Incompatibilidad genética.
- Trisomías.
- Infecciones maternas.
- Drogadicción, tabaquismo o alcoholismo.
- Anomalías de los espermatozoides.
- Proceso febriles.
- Ser mayor de 40 años.
- Si hay antecedentes de abortos (por lo menos 2).
- Uso de ciertos medicamentos (con o sin receta).
- Obesidad.
Si está pensando en embarazarse, acuda con un médico o ginecólogo para aclarar cualquier duda al respecto e informarse.