Si se llegara a comer una o algunas semillas de sandía, no se alarme ni se asuste, pues no le sucederá nada. No son toxicas ni peligrosas. De hecho, al igual que la fruta, las semillas de sandía también nos aportan algunos beneficios, tales como:
- Son antioxidantes.
- Combatir el estreñimiento.
- Proporcionarnos energía.
- Actúan como diuréticos.
- Combatir la hipertensión.
Aunque, la mejor forma es comerlas molidas. También, se pueden consumir a la hora de comer su rebanada de sandía y no pasa nada si te comes las semillas de la sandía.
Pero, si quiere incorpórelas a su dieta, lo puede hacer en licuados, jugos, guisos, tostadas, horchatas, como harina para pan…etc. claro, que como todo alimento, tampoco debe abusar de su consumo.
Por otro lado, la sandía es un excelente alimento, lleno de nutrientes que ayudan a la buena salud del cuerpo:
- Contiene vitaminas A y C. así como minerales hierro, calcio, potasio, magnesio, fósforo y sodio.
- Combaten el estreñimiento.
- Es buena para la hipertensión.
- Es diurética.
- Ayuda en casos de insuficiencia renal.
- Ayudan a curar el ácido úrico.
- Buena para el sistema nervioso.
- Es anticancerígena.
- Es antioxidante.
- Es hidratante.
- Mejora la circulación sanguínea.
- Desintoxica y depura la sangre.
- Sube las defensas.
- Ayuda a disminuir el colesterol malo.
- Ayuda a bajar de peso.
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