El estrés también afecta al sistema digestivo ya que hace que el estómago segregue más jugos gástricos, las paredes se irriteny causa alteración del funcionamiento del colon (que puede terminar en colitis nerviosa). Asimismo, debido a que no llega suficiente sangre al estómago, la digestión se entorpece y con ello, puede presentar:
- Diarrea.
- Cólicos.
- Distensión abdominal.
- Acidez.
- Úlceras.
Demasiada tensión también impide el buen aprovechamiento de los nutrientes.
Con todo, la recomendación consiste en tratar de manejar la tensión nerviosa de la mejor manera posible. Algunas medidas para lógralos son:
- Evitar hacer muchas cosas a la vez, lo mejor es implantarse objetivos realistas.
- Aprender a identificar los problemas y lo que origina estrés, y sobre ello, trabajar, es decir, dar soluciones.
- Dé prioridad a las tareas más importantes y deje al último las que no urgen.
- Trate de no inmiscuirse en asuntos no relevantes o que a usted no le competen.
- Coma de forma saludable, incluya muchas frutas y verduras, beba agua simple y evite la comida muy grasosa.
- No todo el tiempo es trabajar o atender el hogar, también es válido y saludable distraerse un momento: lea un libro, salga a caminar, escuche música, si tiene hijos, juegue un rato con ellos, vayan a un parque.
- Comparta con otros sus preocupaciones. No te guardes para sí mismo sus problemas ya que lo único que va a lograr es aumentar más su angustia. Desahogase con su pareja o con tus amigos, y pida apoyo en ellos.
- Haga ejercicio físico de forma regular, eso ayuda mucho a prevenir el estrés.
- Descanse lo suficiente para que pueda afrontar los retos de cada día con fuerzas y lucidez.
- Evite la cafeína y el alcohol.