





Cuando dormimos implica que nuestro cuerpo entra en un estado de reposo, suspendiendo totalmente toda actividad consciente y movimiento involuntario. Además, resulta ser indispensable para la calidad de vida de lo contrario puede resultar perjudicial para nuestro cuerpo.
Ahora, cuando una persona no tiene sueño y presenta los siguientes síntomas:
- Dificultad para dormirse.
- Dificultad para mantener sueño, es decir se despierta varias veces en la noche.
- Sensación de no dormir bien.
- Despertarse en la madrugada (3 o 4 am).
Si durante el día presenta lo siguiente:
- Cansancio o sueño.
- Trastornos de memoria o reducción de la atención.
- Irritabilidad.
- Nerviosismo.
Todos estos síntomas pueden tratarse de insomnio que dificulta conciliar el sueño, este trastorno suele aparecer y desaparecer repentinamente y además afecta la calidad de sueño y de su bienestar.
Las posibles causas de no poder dormir pueden ser las siguientes:
- Ansiedad.
- Depresión.
- Higiene inadecuada del sueño como:
- Tomar varias siestas al día.
- Consumir cafeína.
- Consumir alcohol.
- Actividad física intensa antes de dormir.
- Horarios irregulares de acostarse o levantarse.
- Realizar actividades intelectuales antes de dormir.
- Enfermedades crónicas como:
- Enfermedades reumáticas.
- Fibromialgia.
- Asma.
- Insuficiencia cardiaca.
- Reflujo gastro-esofágico.
- Ulcera gástrica.
- Apnea.
- Dosificación de medicamentos.
- Idiopático (Una enfermedad de origen desconocida).
Cuando una persona no duerme bien o, mínimo 8 horas, significa que no le estamos dando el descanso necesario a nuestro cuerpo para que recupere la fuerza necesaria, afectando además nuestra apariencia y calidad de vida.
Si padece insomnio consulta a un médico o trate de cambiar ciertos hábitos que perjudiquen su sueño.