El fango volcánico ha sido utilizado durante muchísimos años para fines terapéuticos y estéticos, dando buenos resultados siempre y cuando sea fango puro y rico en minerales. Los fangos o barros volcánicos son aconsejables para cualquier persona, lejos de causar algún mal, solo hacen aportaciones beneficiosas incluyendo aspectos estéticos.
¿Qué es el fango o barro volcánico?
Es una mezcla de tierra volcánica y agua termal resultante de procesos geológicos a lo largo de muchísimos años. Sus componentes son principalmente diversas sales minerales como: azufre, magnesio, potasio, sodio, calcio, yodo, hierro, aluminio, zinc, etc. dependiendo de su tipo y el origen donde haya sido tomado.
Beneficios del fango volcánico:
- El fango volcánico es principalmente beneficioso en las articulaciones, en los músculos y en la piel.
- Ayuda a tonificar y restaurar el brillo natural de toda la piel.
- Ayuda a la absorción de minerales y las vitaminas que requiere el cuerpo.
- El fango o barro volcánico sirve para refrescar la piel y la tonifica.
- Regeneran la epidermis.
- Dan limpieza a la piel.
- Es bueno contra la flacidez.
- Ayuda a dejar la piel libre de toxinas.
- El fango o barro volcánico sirve para proporcionar un aspecto sano y jovial.
- En mascarilla es útil para absorber grasas e impurezas.
- Combatir arrugas y el envejecimiento.
- Acelera la renovación celular.
- Mejora la circulación sanguínea.
- Es excelente para revitalizar y fortalecer los tejidos.
- Alivia dolencias de la artritis y otros dolores articulares.
- Ayuda a nuestro sistema respiratorio y nervioso.
- Permite aumentar nuestra energía.
- Combate el estrés.
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