





Moverse con algún ejercicio físico, además de favorecer a la salud general del cuerpo, ayuda aun a algo muy importante en nosotros: el metabolismo. El ejercicio no solo mejora tu aspecto y tu condición física, también acelera el metabolismo y así quemas más calorías.
Cualquier actividad es buena, por ejemplo:
- Caminar algunas cuadras al trabajo.
- Pasear con el bebé en los brazos.
- Subir escaleras en lugar de tomar el elevador.
- Salir al parque a darse un paseo caminando.
- Caminar de más al ir de compras.
Ejercicios buenos para acelerar el metabolismo:
- Hacer pesas.
- Correr.
- Nadar.
- Tenis.
- Bicicleta.
- Gimnasia.
Recuerda que para tener un correcto funcionamiento metabólico es necesario evitar el sedentarismo, evitar eliminar horas de sueño y tener un descanso apropiado. Además:
- No te saltes ninguna comida
- Bebe suficiente agua.
- Toma té verde.
- Come frecuentemente y en cantidades moderadas. Se sugiere 5 veces al día.
- Incluye fibra a la dieta diaria.
- Reduce gradualmente la ingesta de azúcares y harinas refinadas.
- No te impongas dietas demasiado estrictas.
- Come proteínas vegetales o animales, frutas y verduras, cereales y tubérculos.