La dieta mediterránea es una elección hacia una vida saludable, ya que combina los alimentos para cubrir las necesidades nutricionales del organismo, dando énfasis también al estilo de vida activo; es una toda manera de vida que se fundamenta en el equilibrio y variedad. Los alimentos de temporada es algo característico de la dieta mediterránea.
¿Para quién va dirigida la dieta mediterránea?
- La dieta mediterránea es beneficiosa para toda la familia, para todo aquel que desee tener mayor esperanza de vida, para todos lo que quieran cuidar su corazón de una manera saludable, para quien guste de solo alimentos sanos, para quien sabe que es importante cuidar la salud de todo el cuerpo.
- También va dirigida para todo aquel que aprecia y sabe de la importancia de los alimentos saludables que se dan en la zona donde se vive.
¿Qué alimentos son más importantes y característicos en la dieta mediterránea?
- Esta dieta es rica en pasta y arroz, verduras, legumbres, fruta, aceite de oliva, poca carne y mucho pescado, pan integral, y todo sazonado con algunas especias como el ajo, el orégano, algo de pimienta y pequeñas cantidades de buen vino.
- Estos alimentos contribuyen a tener una dieta baja en grasas saturadas y alta en grasas monoinsaturadas.
- El aceite de oliva virgen, ampliamente utilizado en la dieta mediterránea, tiene un 80% de ácido oleico (monoinsaturado) y sólo un 14% de ácidos grasos saturados.
- Los mejores son los alimentos casi sin procesar, frescos y de temporada. Los alimentos de temporada son específicamente las frutas; los frescos las verduras, lácteos y las carnes.
- Evita la carne roja y opta por la carne de ave.
- La mantequilla y la margarina no son tan convenientes en la dieta mediterránea.
- Agua natural es lo mejor en lugar de refrescos o jugos procesados.
¿Qué alimentos se comen en la dieta mediterránea?
- Cereales: avena, cebada, arroz, pastas, mijo, pan de trigo, etc.
- Verduras: brócoli, zanahorias, pepinos, pimientos, rábanos, espinacas, etc.
- Frutas: higos, piñas, sandías, plátanos, fresas, peras, manzanas, naranjas, uvas, etc.
- Frutos secos, legumbres y semillas: almendras, avellanas, pistachos, nueces, frijoles, garbanzos, semillas de calabaza, semillas de sésamo, etc.
- Aceites: aceite de oliva.
- Hierbas y especias: Anís, albahaca, laurel, chile, clavo, comino, hinojo, ajo, etc.
- Pescados y mariscos: salmón, sardinas, camarones, atún, etc.
- Vino: vino tinto.
- Quesos y yogurt. Que sean sin tanta grasa.
Este patrón alimentario unido a un estilo de vida sin excesivo estrés y que incluya ejercicio físico, presenta efectos beneficiosos para la prevención de enfermedades cardiovasculares, algunos tipos de cáncer, obesidad y osteoporosis, entre otros problemas.