Muchas veces la mayoría de personas ha experimentado un dolor de estómago o dolor abdominal, el cual es una molestia común y que puede ser vago, espasmódico o en forma de cólico y puede presentarse en distintas zonas del abdomen en relación a la causa que lo haya provocado.
Desde luego que dormir con un dolor de estómago es malo, no solo por simple hecho de que el dolor no nos dejara dormir, sino que puede tratarse de algo más grave, ya que la intensidad del dolor no siempre manifiesta la gravedad que lo causa, bien puede tratarse un dolor intenso y simplemente se trata de haber ingerido demasiada comida o algún alimento echado a perder o puede presentarse un dolor pequeño y tratarse de cáncer de colon o apendicitis.
Dolor de estómago al ir a dormir
Es importante estar atentos a los dolores que se manifiesten a la hora de ir a dormir, ya que un dolor abdominal de poca gravedad e intenso puede ser:
- Intoxicación alimentaria.
- Estreñimiento.
- Síndrome del intestino irritable.
- Alergias o intolerancia a medicamentos (como la intolerancia a la lactosa).
- Gastroenteritis vírica epidémica.
En cambio un dolor abdominal poco intenso y espontaneo puede ser:
- Cálculos renales.
- Apendicitis.
- Cáncer del estómago, el colon (intestino grueso) y otros órganos.
- Úlceras.
- Acidez gástrica o reflujo gastroesofágico.
Por otro lado pueden presentarse dolores intensos y leves, pueden tratarse de:
- Cólicos menstruales intensos.
- Fatiga muscular.
- Infecciones urinarias.
- Embarazo ectópico.
Por último, el dolor abdominal durante la noche como en el día, puede ser un signo de algún trastorno de salud subyacente, por lo que se recomienda que ante cualquier molestia deba acudir a un médico.