





El rastrillo es un instrumento necesario que ayuda a mejorar la apariencia (belleza), lo usan tanto hombres como mujeres. Está diseñado para que las probabilidades de cortarse la piel sean muy mínimas, sin embargo como en todo, existe un riesgo. Es por ello que no se recomienda prestar o compartirlo.
¿Qué pasa si uso el rastrillo de otra persona?
Al rasurarse ya sea por las prisas o mal uso se corre el riesgo de hacerse una herida, eso no tendría importancia si solo uno lo usa, pero se vuelve un problema (situación de riesgo) si lo compartimos o lo prestamos, especialmente unos instantes después de acabarlo de usar. Los riesgos de usar o compartir un rastrillo son:
- Exponerte a una infección.
- Posible contagio de enfermedades de transmisión sanguínea como la hepatitis y el VIH.
Las probabilidades se reducen si usa un rastrillo unos días después de que la otra persona lo haya usado, ya que los virus y bacterias no sobreviven mucho tiempo fuera de su entorno.
Como sea, lo mejor es no prestar o compartir, con buena cara di no puedo prestártelo y tampoco estén pidiendo, no te arriesgues.