Los alimentos dulces al igual que el resto de nuestra alimentación que preparamos en nuestra dieta diaria, debe ser sin excesos, sin abusar su consumo de alguno, se debe equilibrar la ingesta de cada alimento. Principalmente lo que hace el abuso de los dulces y de los alimentos dulces es: alteraciones y carencias nutricionales. Y si continuamos así, sin evitar los abusos, se verá reflejado al paso del tiempo, pero de forma desfavorable.
Ejemplos: paletas de dulce, caramelos, golosinas, flan acaramelado, merengues, rebanadas de pastel, pastelillos, chocolatinas, etc.
Consecuencias del abuso de los dulces y de muchos alimentos dulces en la dieta diaria:
- Desequilibrio en los niveles glucémicos.
- Problemas cardiacos.
- Mala nutrición en general, obesidad y caries.
- Entorpecimiento del proceso de aprendizaje.
- Mala memoria y mala agilidad mental
- Hiperactividad.
- Reduce las defensas.
- Dolor de estómago.
- Falta de sueño.
- Alergias.
- Riesgo a padecer cáncer.
- Los dulces en exceso dañan el hígado al igual que el alcohol.
- Debilitan la vista.
- Favorece la osteoporosis.
- Causa desequilibrios hormonales.
- Arrugas, envejecimiento prematuro.
Es verdad que comer dulces da buen ánimo, pero comer en exceso no es bueno, y tampoco eliminar cualquier dulce lo es.
Los azucares, alimentos dulces, ni los dulces son malos, lo malo es cuando se abusa de ellos. Es importante porque la glucosa es la fuente fundamental de energía celular.
La solución:
- Mantén los dulces y alimentos dulces en tu dieta diaria, pero raciona la cantidad que comes.
- Prefiere o combina con frutos secos.
- Consume uno o dos dulces (golosinas, caramelos, chocolatinas, etc.) solamente por día.
- Opta por frutas naturales, además son muy deliciosas: Plátanos, uvas, sandía, papaya, mango, melón, piña, etc.
- Come yogurt y miel (tampoco sin excederse).
- Evita el estrés y depresión.
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