





A la media hora de haber fumado marihuana se presentan efectos como la excitación, euforia y palpitaciones del corazón, que muchos suelen interpretar como excitación sexual. Posteriormente a esto actúa como sedante.
La realidad es que la marihuana no tiene efecto directo en los órganos sexuales o en el funcionamiento sexual. Más bien lo que hace esta hierba es alterar la experiencia subjetiva del sexo.
De hecho, está comprobado que esta droga y cualquier otra, hacen más mal que bien, a pesar de su posible influencia en la actuación sexual, cuando se consumen en dosis muy pequeñas.
Claro que el efecto de la marihuana varía mucho de una persona a otra, y aun en un mismo sujeto en diferentes ocasiones y circunstancias.
No obstante, en los hombres la marihuana a largo plazo puede causar una disminución de esperma, así como una mala calidad de espermatozoides. Mientras que en las mujeres puede disminuir la lubricación vaginal e impedir la ovulación.
En ambos sexos a largo plazo puede disminuir el interés sexual, en lugar de mejorarlo, como erróneamente, muchos piensan.
Finalmente, muchos se drogan previo al acto sexual para “supuestamente” tener más aguante y goce, y puede que hasta cierto punto sea real. Pero la realidad, es que detrás de esta droga, se esconden la inseguridad y el miedo a fallar.
Busque ayuda profesional y evite destruir su vida.