Las grasas son lípidos cargados de calorías y considerados como un tipo de nutriente esencial para el organismo, pero perjudicial si se consumen en exceso, en especial las grasas saturadas. Es también fuente de energía y colabora en la regulación corporal.

Enfermedades ocasionadas por la ingesta excesiva de grasas

Aparentemente no hay nada de malo en las grasas y además son necesarias en nuestro cuerpo, sin embargo cuando hay un exceso de consumo resulta perjudicial para nuestra salud, los efectos que produce el exceso de grasa en el organismo son:

• Trastornos del metabolismo.
• Sobrepeso y obesidad.
• Enfermedades cardiovasculares.
• Enfermedades respiratorias (causadas por el sobrepeso).
• Aparición de diabetes.
• Colesterol alto.
• Hipertensión arterial.
• Mala circulación sanguínea.

Como podemos ver un exceso de grasa en nuestro organismo puede ser grave por lo que es importante moderar el consumo en nuestra alimentación. Pero cabe aclarar que existen dos tipos de grasas las malas y las buenas. Siendo las primeras las que hay que evitar o comer de forma muy moderada y las segundas deben consumirse con moderación.

• Grasas malas: helados de crema, mantequilla, crema, embutidos, carnes rojas en exceso, chocolate, bollería industrial, salsas cocinadas, mayonesa, pasteles, flanes, cremas, galletas, papas fritas, chicharrones, vísceras (hígado, sesos, tripas, etc.), aceites parcialmente hidrogenados, comidas fritas…etc.
• Grasas buenas: aceite de oliva, de canola, de maíz, de soya, y de girasol. Así como nueces, cacahuates, pistaches, avellana, piñones, semillas (de girasol y calabaza), aguacate, pescados…etc.

Por último, tampoco podemos eliminar la grasa de nuestra alimentación ya que es necesaria para muchas funciones, lo único que se recomienda es moderar su consumo, en especial las grasas malas.